La prevalencia de esta enfermedad autoinmune ha aumentado a paso galopante y, si no se toman medidas, pasará de 8 millones a 17 millones en el 2040, advierte un nuevo modelo. Casi 4 millones de individuos estarían vivos actualmente de no haber sufrido complicaciones asociadas a ella y completamente prevenibles con el debido acceso al diagnóstico y al tratamiento oportuno.
El pronóstico se deriva del llamado TD1 o Índice de la Diabetes tipo 1, creado mediante una alianza internacional para “revelar el impacto de esta enfermedad en cada país del planeta” a partir de una encuesta global a 500 endocrinos y de 400 publicaciones.
La diabetes tipo 1 es una enfermedad autoinmune incurable que afecta la producción de insulina en el páncreas, lo que puede deteriorar los riñones, ojos, nervios, corazón y hasta causar la muerte prematura.
Si bien algunos factores como genética pueden aumentar el riesgo de padecerla, a diferencia de la diabetes tipo 2 no es causada por la dieta o el estilo de vida. Diagnosticarla a tiempo y tener acceso a los tratamientos es fundamental.
El TD1 es el primero es contabilizar una pieza importante del rompecabezas que hasta ahora no se factorizaba en otros modelos: la cantidad de individuos que estarían vivos, de no haber sufrido complicaciones de la diabetes tipo 1: 3.9 millones de personas al día de hoy y 6.85 millones para el 2040.
Visto de otra manera: un promedio de 32 años de vida saludable perdidos por individuo, que representan “tiempo perdido por enfermedad, discapacidad o muerte prematura asociada a la diabetes tipo 1”.